Las propinas suelen conformar un aspecto fundamenta en el viaje o vacaciones del común de las personas, ya que las mismas suelen condicionar la atención que se recibe por parte de los empelados de los sitios que se visitan, principalmente si es que estamos hablando de algún establecimiento gastronómico.
Sucede que cada parte del mundo cuenta con sus propias costumbres en relación a las propinas, y en Ámsterdam por ejemplo la cuestión es bastante púnica, ya que aquí la propina no parece ser tan importante, ya que al menos los locales no acostumbran a dejarla, salvo luego de una comida en algún establecimiento de categoría.
Igualmente está muy mal visto que un turista no deje propina, por lo que lo acostumbrado en Ámsterdam gira en torno a un 5 o un 10 % del total de lo gastado, una suma que realmente no modifica mucho los bolsillos de los turistas pero si los de los empleados de los establecimientos, por lo que esto es algo que hay que tener bastante en cuenta.