El estilo conocido como Manuelino es exclusivo de Portugal. Predominó entre 1490 y 1520, y sigue siendo una de las formas de arte más memorable que han surgido desde el país.
Es el nombre de Manuel I, que reinó desde 1495 hasta 1521. Cuando Don Manuel I inauguró el estilo, el estilo manuelino fue sorprendentemente moderna, una salida con visión de futuro de la rigidez de los modelos medievales. Que originalmente decoraban los portales, balcones e interiores, en su mayoría de edad en lugar de adornar las nuevas estructuras. El estilo marcó una transición del gótico al Renacimiento en Portugal.
Los veteranos afirman que manuelino, también llamado Gótico del Atlántico, derivado del mar, aunque algunos observadores de hoy en día detectar un surrealismo que prefigura el estilo de Salvador Dalí. Todo sobre arte manuelino es una celebración de formas marinera.
En este estilo de las obras, la iconografía cristiana se combina con conchas, cuerdas, ramas de coral, escudos heráldicos, símbolos religiosos, e imaginativas formas transmitidas por el agua, así como con temas árabes.
Muchos monumentos en todo el país – en particular el Monasterio de los Jerónimos de Belém, en las afueras de Lisboa – se ofrecen ejemplos de este estilo. Otros se encuentran en las Azores y Madeira. A veces manuelino se combina con el famoso paneles de azulejos, como en el Palacio Nacional de Sintra. El edificio manuelino en Portugal fue la Iglesia de Jesús en el clásico de Setúbal, al sur de Lisboa. Grandes pilares en el giro interior en espiral para soportar un techo de crucería extravagante.
Aunque es sobre todo un estilo arquitectónico, el estilo Manuelino afectó a otros campos artísticos. En la escultura, manuelino fue generalmente decorativos. Empleados sobre las puertas, rosetones, balaustradas y dinteles, ofreció de todo, desde una mazorca de maíz a un tallo de cardo. Manuelino también se ve afectada la pintura, los colores brillantes gemas caracterizan obras influenciadas por el estilo.
El pintor más conocido manuelino fue Grão Vasco (también llamado Vasco Fernandes). Sus obras más famosas incluyen varios paneles, ahora en exhibición en el museo Grão Vasco, que estaban destinados originalmente para la Catedral de Viseu. El más famoso de estos paneles son el Calvario y San Pedro, ambas de 1530.
Otro artista principal fue Jorge Alfonso, pintor de la corte desde 1508 hasta 1540 y un nativo de Brasil. Él era el líder de la llamada Escuela de Pintura de Lisboa. No hay obras existentes que pueden ser sin duda que se le atribuyen, sin embargo.