7 lugares del mundo que parecen de otro planeta

El hombre siempre ha vivido obsesionado con conquistar otros planetas, descubrir qué hay bajo los páramos de Marte y en los anillos de Saturno, pero lo cierto es que, en ciertas ocasiones, no es necesario montar en cohete cuando nuestra querida Tierra alberga estos 7 lugares del mundo que parecen de otro planeta.

Dallol (Etiopía)

Considerado como el lugar más caluroso del mundo con una media de 34º durante todo el año, Dallol nos recuerda a la versión más psicodélica de Mordor: un conjunto de cráteres volcánicos en la depresión del Danakil, al norte de la emergente Etiopía, cuyos colores amarillo, rojo, verde u ocre burbujean como resultado de la introducción de magma basáltico en antiguos depósitos salados que formar diversos salares alrededor del cráter originario. Un ejemplo más de cómo Etiopía se confirma como uno de los países más singulares del continente africano.

Montañas Danxia (China)

En la provincia de Gansu, rozando las cordilleras del Tibet al noroeste de China, se encuentra el Parque Geológico de  Zhangye Danxia, lugar famoso por las conocidas como Montañas Danxia (o Nubes Rosadas), nombre con el que se conoce a este arco iris de roca visitado por miles de turistas cada año. Una paleta de colores nacida de la pigmentación de diversos minerales  tras el movimiento de la placa euroasiática hace millones de años cuyo resultado es simplemente arrebatador.

Socotra (Yemen)

A 220 kilómetros al sur de Yemen y 80 de Somalia, dato que ha provocado la disputa de ambos países por su territorio durante años, existe una isla que bien podría recordarnos a una película de Tim Burton o cierto escenario de la cinta Avatar de James Cameron. Socotra es una isla cuyo microclima ha permitido el nacimiento de especies animales y vegetales nunca vistas en cualquier otro lugar del mundo y entre las que destacan ejemplares como el «árbol de pepino», cuyo tronco es mayor que su copa, o el árbol Sangre de Dragón, el cual simula la forma de un champiñón enorme. A su vez, los caracoles gigantes, reptiles sinuosos y aves como el buitre egipcio complementan la esencia marciana de este lugar único.

Salar de Uyuni (Bolivia)

El Salar de Uyuni, uno de esos lugares del mundo que parecen de otro planeta.

Al caminar sobre el suelo transparente del mayor salar del mundo sientes que estás haciéndolo sobre el cielo, el mismo que se refleja en este paraíso alucinante de Bolivia convertido ya en una de sus estampas más famosas. El salar de Uyuni, con sus fllamencos y sus 10 billones de toneladas de sal contenidos en una superficie preciosista de 4 mil millas cuadradas es posiblemente uno de los lugares más espectaculares del mundo y uno de los highlights a vuestro paso por la cada vez más emergente nación boliviana.

Namib Naukluft Park (Namibia)

Otro de los lugares más emergentes del mundo es Namibia, país africano cuyos parques naturales y dunas eternas configuran un universo de cultura, color y estampas para enmarcar entre las que sobresale el Namib Naufluft Park. Situado en pleno Namib Desert, considerado a su vez como el único desierto costero del mundo, el Naufluft se despliega en forma de páramos ocres donde se elevan unas acacias de más de 500 años de edad cuyas siluetas fantasmagóricos inspiran un aspecto totalmente marciano. El mejor lugar para contemplar este espectáculo visual es Deadvlei, porción del Nauflukt en el que posarse al anochecer para observar estos árboles apuntando a un cielo lleno de estrellas se convierte en todo un deleite para los sentidos.

Jökulsárlón (Islandia)

El director Ridley Scott escogió varios lugares de Islandia para rodar su película Prometheus, posiblemente porque pocos países del planeta evocan unos paisajes tan fantasiosos como los de Islandia. La isla nórdica se confirma como uno de los lugares más curiosos del mundo gracias a sus cráteres dormidos, sus piscinas naturales, sus cascadas enormes y lagos como Jökulsárlón, al sur del glaciar Vatnajökull y englobado dentro del parque natural de Skaftafell, cuya playa congelada está considerado como el más curioso de los rincones de este país isleño. Simplemente espectacular.

Pozo de Darvaza (Turkmenistán)

Fotografía: Tormod Sandtov

El término «puerta del Infierno» ha sido aplicado desde hace siglos como motivo literario o religioso. Sin embargo, la versión más literal de esta boca de fuego cabe encontrarla en el desierto de Karakum, en Turkmenistán, el cual ocupa hasta un 70% de la superfície de todo el país. Un lugar cuya historia de origen cabe encontrarla en la búsqueda de gas natural por parte de los soviéticos en 1971. Sería tras una excavación cuando se dieron cuenta de la exposición de diversos gases cuya mejor forma de disipar era prendiéndo fuego al socavón. Más de cuarenta años después, la llama prendida a este pozo sigue  avivada para mayor deleite de quienes se dejan caer por este recóndito lugar del aún desconocido país de Turkmenistán para comprar este portento de la naturaleza. . . y del hombre.

Estos 7 lugares del mundo que parecen de otro planeta continúan esperando a cientos de turistas que, antes de decantarse por los futuros viajes espaciales, deberían plantearse una visita a estos escenarios dignos de película de ciencia ficción, de ese libro de fantasía que la Tierra evoca tanto (o más) que cualquier otro planeta de nuestra galaxia.

¿Cuál de estos fantásticos lugares te gustaría visitar?


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