Uno de los festivales tradicionales en toda China que se celebra el decimoquinto día del octavo mes del calendario lunar, es el Festival de Medio Otoño. Una celebración, tranquila, elegante y esencialmente nocturna. A fin de cuentas, es una especie de celebración que reúne a la familia en un entorno íntimo.
Esta celebración, también llamado Festival de la Luna, es una especie de acción de gracias donde se reflexiona y se admira los dones de la naturaleza y las bondades de la ardua jornada anual en el campo.
El festival continúa siendo un motivo rico y colorido, con muchas actividades y golosinas, incluidos los faroles, las danzas del dragón y la quema de incienso en diversas partes del país, todos bajo la Luna Llena, más brillante en ésta época del año.
China también aprovecha entonces la oportunidad para recordar una leyenda asociada con las celebraciones lunares. Se dice que en tiempos antiguos 10 soles brillaron en el cielo, quemando la tierra y los cultivos. Para salvar al mundo de la miseria, un arquero llamado Hou Yi derribó nueve de los soles.
Chang’e Hou Yi, la esposa era una mujer hermosa y amable. Un día, Hou Yi recibió un elixir de la vida de la diosa del cielo, y cuando regresó a casa, se escondió en un armario. Pero el villano Peng Meng veía todo y cuando Hou Yi fue a cazar, con la espada en la mano, Peng Chang’e obligado a darle el elixir.
Sabiendo que no podía derrotarlo, Chang’e tragó el elixir y comenzó a flotar en el cielo. Se acomodó en la Luna, el lugar más cercano donde podía ver a su marido en la tierra. Desde entonces, la costumbre de adorar a la luna durante mediados de otoño ha continuado.
Una popular tradición también es la de comer pasteles de luna, que suelen ser redondas, y similar a fruitcakes occidentales. Existen incontables variedades de pasteles de luna, pero el relleno típico incluye nueces, pasta de semillas de loto, pasta de frijol, dátiles chinos, almendras, carne picada o semillas de melón.
Aunque las costumbres y las prácticas varían en todo el país, casi todo el mundo tiene la oportunidad de mostrar su amor por su familia y orar por una vida mejor durante el Festival del Medio Otoño donde los chinos consideran a la luna llena como símbolo de la unión familiar.