La función de los mosaicos en Grecia era decorativa, algo similar a lo que hoy es una alfombra. En la antigua Grecia era un elemento de lujo, no había mosaicos decorados en todas las casas, inclusive no había en todos los palacios. Los palacios más antiguos micénicos y minoicos tenían los pisos de losas. A partir del siglo V a.c. se comenzaron a ver pequeños mosaicos con pocos detalles. Sólo se colocaban en la sala principal andrón, donde el hombre de la casa se reunía con otros hombres a tomar y a comer. Los mosaicos encontrados en la ciudad de Olindo eran en blanco y negro.
En casi todos los lugares donde hay mosaicos se puede apreciar las teselas, cubos de mármol de distintos colores con los que se formaban los mosaicos y las orlas circundaban el motivo principal.
Según se fueron perfeccionando comenzaron a haber más escenas en ellos, mitológicas, de la vida diaria, de obras de teatro y otras. En Delos, en los templos fue donde primero se comenzaron a colocar lujosos mosaicos. Se colocaron en el Templo de Apolo, ya que la isla era dedicada al dios Apolo. En el barrio del Teatro es donde se pueden ver ruinas de destacadas residencias donde se encontraron mosaicos y se las empezó a llamar por las figuras que tenían los mosaicos, la casa de Dionisos, la del tridente, la casa de los delfines, la casa de los pingüinos, de las máscaras, etc. Los mosaicos son manifestaciones de la opulencia, por eso se cree que tuvieron su esplendor con Filipo II, y con Alejandro Magno.
Los mosaicos aún hoy siguen desde el piso desafiando al tiempo.