Cualquiera que haya visitado alguna vez Egipto, o sepa algo sobre sus monumentos y luego se dirija a Roma, notará algo que es verdaderamente inesperado, resulta que muchos monumentos romanos se ven claramente influenciados por la estructura y arquitectura de muchos monumentos egipcios.
Uno de los ejemplo de este tipo de monumentos que se suelen ver en cualquier paseo por Roma, son los muchos obeliscos, que suelen verse a lo largo y a lo ancho de toda la ciudad, especialmente cuando nos dirigimos a alguna plaza, ya que en las mismas suelen haber varios obeliscos juntos.
Pero, ¿a qué se debe esto?, simple, hace cientos y cientos de años, durante la época de los Ptolomeos, Egipto, se puede decir que era prácticamente una de las tantas provincias del poderoso imperio romano, por lo que toda decisión importante que se debía tomar en Egipto, primero debía de ser aprobada por el Senado romano.
Debido a lo que les acabamos de comentar, no es difícil de imaginar el intenso tráfico de artículos provenientes de Egipto, que tenían como destino a la entonces capital del Imperio Romano, Roma.