Cada país o región dentro de un mismo país tiene sus trajes tradicionales, ropa que en líneas generales se desprende de la ropa típica de la Edad Media y que representa al campesino, al trabajador. Austria no es la excepción, así que cuando pensamos en este pequeño, aunque otrora gran país de Europa, tenemos una imagen típica.
La imagen del austriaco típico es la de un hombre vestido de tirolés y la de la mujer austriaca es la de una mujer rubia de largas faldas y trenzas. Lo cierto es que estos trajes típicos austriacos, que uno piensa tan característicos de una zona en particular, nunca lo son tanto y abarcan más tierras e incluso más países que los que suponemos.
En líneas general el vestido tradicional femenino en todas las regiones austriacas es el Dirndl: una falda larga con una blusa que a su vez está parcialmente cubierta con un chaleco unido con ganchos, lazos o cremallera por delante y sobre el busto. Las mangas son amplias y abombadas y toda la prenda se cubre con un delantal.
Por su parte, los hombres usan los Lederhosen, unos pantalones de piel que en general llevan tirantes enganchados en la cintura y que se llevan con una camisa de color blanco con adornos florales bordados. Y claro, el pequeño sombrero tirolés no puede faltar y lo mismo la chaqueta. Ambos trajes rezuman un origen campesino pero hoy se han vuelto tan tradicionales y típicos que si un turista quiere llevarse uno le puede costar muy caro.
Fuente – Austria.info
Foto – Freunde gruenwalds