Los 7 lugares más coloridos de África

Erase una vez un gran continente, uno que durante siglos fue saqueado y maltratado pero que, aún así, continuaba sonriendo. De hecho, los colores forman parte de su cultura como ninguna otra en el mundo. Colores con los que las cientos de etnias de ese continente llamado África han pintado las paredes de sus cabañas en señal de alerta, con el que han celebrado el triunfo o han intentado unificar las religiones en ciudades convulsas de un continente al que muchos siguen confundiendo con un solo país. No te pierdas estos 7 lugares más coloridos de África.

Jardin Majorelle (Marruecos)

El país más abierto del Magreb es sinónimo de color, el de sus bazares y artesanía, pero especialmente de un azul presente en pueblos como Chaouen o paraísos urbanos como el Jardín Majorelle, uno de los más exóticos de la ciudad de Marrakech. Instalado en la ciudad marroquí en 1924, el pintor Jacques Majorelle inventó un nuevo color, el azul majorelle, con el que pintó parte de su jardín privado y el taller de trabajo que hoy día luce entre árboles de todos los continentes y vasijas cuyos colores aportan aún más encanto a este lugar bendecido por el agua y la sombra.

Lago Rosa (Senegal)

Foto de Jeff Ataway

A 35 kilómetros de Dakar, una mancha rosa se dibuja en el extremo derecho de la Península de Cabo Verde, y si nos aproximamos algo más a su orilla, posiblemente veamos a hombres de torsos desnudos sumergiéndose en sus profundidades y llenando de sal las barcas. El alto grado de salinidad y el color rosa de este lago se debe a la presencia del alga Dunaliella salina, principal productora de carotenoides y, por ende, de teñir uo de los lagos rosas más famosos del mundo junto con el australiano lago Hillier, en Australia, o el lago Makadi, en Kenia.

Muizenberg Beach (Sudáfrica)

En el repaso de lugares más coloridos del mundo incluí en su momento el barrio malayo de Bo-Kaap, si bien en esta ocasión aprovecho para incluir otro highlight psicodélico de Ciudad del Cabo: Muizenberg Beach. La playa donde según muchos comenzó el surf en Sudáfrica fusiona playas de corrientes épicas con barrios de pescadores o edificios coloniales tan antiguos como Het Posthuys, el cual data de hace más de doscientos años, siendo las casitas de colores de Muizenberg Beach una de las estampas más famosas e irresistibles de la conocida como Nación del Arco Iris.

Mpumalanga (Sudáfrica)

La provincia de Mpumalanga, al noreste de Sudáfrica, es famosa por la presencia de las diferentes aldeas culturales de los Ndebele, una tribu de los Nguni que durante los años del apartheid aprendieron el arte de utilizar los colores como señales de alarma, miedo o hambre. Años después, estas figuras de colores geométricas plasmadas en las cabañas de pueblos como Kghodwana, Mapoch o Botshabelo darían paso a un arte Ndebele convertido en el diseño étnico más cotizado de Occidente. Un torrente de color exportado al resto del mundo en 1991 por la local Esther Mahlangu y la creación de un BMW con diseños Ndebele a fin de simbolizar la lucha de su país frente a la represión extranjera.

Nairobi (Kenia)

Durante los dos últimos meses, hasta nueve mezquitas e iglesias de Kenia han sido pintadas de un color amarillo intenso definido como «amarillo optimista». La iniciativa Colour in Faith se ha propuesto unificar las religiones cristiana, musulmana o judía en un país constantemente asediado por gobiernos inestables y ataques de talibanes que llevaban a cabo sus reclutamientos y matanzas en lugares sagrados. El creador de este proyecto artístico, el colombiano Yazmany Arboleda, ha salido a las calles incitando a los habitantes de ciudades como Nairobi a expresar mediante el color su deseo de un país pacífico.

Dallol (Etiopía)

Con temperaturas que alcanzan hasta los 60º en el mes de julio y medias anuales de 41º, Dallol, la versión africana de Mordor, está considerado como el lugar más caliente del mundo. El cráter, ubicado en el desierto de Danakil, es un conjunto de termas erosionadas por la unión de magma y sal que da como resultado una paleta de colores que van del rojo al amarillo, pasando por el verde o el marrón. Uno de los grandes atractivos del que es uno de los países más emergentes de África gracias a su herencia cafetera o sus ciudades medievales.

Tierra de Siete Colores (Isla Mauricio)

En la llanura de Chamarel, un pueblecito de esta paradisíaca isla del océano Índico, la tierra adquiere hasta siete colores (tonalidades de violeta, rojo, marrón, verde, azul, púrpura y amarillo) que nunca llegan a erosionarse gracias a las tormentas tropicales de la isla. Este conjunto de dunas multicolores se debe a la presencia de barro ferralítico compuesto por la descomposición del basalto procedente de la roca volcánica en el barro.

Estos 7 lugares más coloridos de África confirman el encanto de unas culturas para las que que el color, más que un símbolo cultural, se ha convertido también en una herramienta de protesta y lucha. Una realidad presente en países como Sudáfrica o, actualmente, una Kenia que utiliza el amarillo a favor de la unión de las diferente formas de fe en un continente al que, por desgracia, muchos siguen confundiendo con un solo país.

¿En cuál de estos lugares te gustaría perderte?


Deja tu comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

*

*