Requisitos para casarse en Noruega

Por muchas y variadas razones, son muchas las parejas que desean casarse en Noruega. Hablamos de parejas que desean iniciar una nueva vida en común en el país escandinavo o que se encuentran viviendo ya allí y deciden formalizar su situación. También está el caso de las parejas de enamorados de otros países que sueñan con una boda en un destino diferente bonito y evocador: la tierra de los fiordos.

A todos ellos les interesará mucho la información que traemos hoy. Repasaremos los aspectos legales y burocráticos exigidos para casarse en Noruega así como algunas de las tradiciones y usos vinculados a esta ceremonia. Todo con el objetivo de que todo salga bien en este feliz día.

Requisitos legales

Las parejas que deseen contraer matrimonio en territorio noruego deben realizar los siguientes trámites:

• Contar con ambos pasaportes en vigencia y disponer de certificados de nacimiento válidos.
• Aportar una licencia de matrimonio del país de origen (certificado de soltería o, si procede, de divorcio o de defunción del cónyuge en caso de viudos y viudas) para certificar que no hay ningún obstáculo para celebrar el matrimonio.
• Comunicarse con el juzgado del condado correspondiente al lugar donde se celebrará el enlace a fin de recibir una autorización de matrimonio expedida por las autoridades. Este trámite se demora cerca de dos semanas, si no existe ninguna circunstancia fuera de lo normal. Para conseguir esta autorización hay que pagar una pequeña tasa.

Es habitual que las personas que quieren casarse en Noruega no se encuentren en el país para llevar a cabo todos estos trámites. Tampoco disponen de un número de identificación personal noruego. En estos casos hay que dirigirse en primer lugar a la Oficina del Registro Nacional (Sentralkontor for folkeregistrering, en noruego) cuya sede se encuentra en la capital del país, Oslo. Esta es su página web oficial: skatteetaten.no.

Los procedimientos para las ceremonias de matrimonio civil en Noruega corren a cargo de un notario público. En caso de ciudadanos extranjeros, la forma más ágil y cómoda de realizar todos estos trámites burocráticos es comunicarse en primer lugar con la embajada de Noruega en el país de residencia de la pareja.

Matrimonio de género neutro

Noruega es uno de los países más liberales y abiertos del mundo. Ya en enero de 2009 modificó la legislación sobre matrimonios para adaptarla a las demandas sociales que pedían el reconocimiento legal de todo tipo de parejas.

Desde entonces, gracias a los cambios efectuados en la ley, el matrimonio tiene género neutro. Es decir, la documentación necesaria para contraer matrimonio es exactamente la misma, independientemente de si se trata de personas de diferente sexo o del mismo sexo.

Casarse en Noruega: ritos y tradiciones

Más allá de los engorrosos y aburridos procedimientos legales, es interesante conocer algunas de las viejas tradiciones y costumbres de las bodas en este país. Puede que sea buena idea incorporarlas a la ceremonia para aquellas personas que quieran casarse en Noruega. Estas son algunas de las más populares:

Ropa y vestidos

La tradición manda que las novias noruegas lleven el pelo recogido y lleven sobre su cabeza una corona de oro o de plata de la que cuelgan pequeños brazaletes en forma de cuchara.

En cuanto a los novios, el atuendo clásico es un traje de lana hecho a mano, llamado bundas. Esta vestimenta tradicional consta de una camisa blanca, un chaleco, un abrigo, un pantalón corto y un par de medias que llegan hasta las rodillas. Es el traje típico, pero no todos los noruegos se visten así el día de su boda y optan por trajes más convencionales.

Música

La salida de la pareja del lugar de la ceremonia, o bien su entrada al lugar del banquete, está acompañada por el sonido de los tradicionales violines Hardanger, el instrumento más carismático de la música folk noruega.

La pieza musical que se interpreta en casi todas las bodas es una melodía llamada «Ven a la boda», el equivalente noruego de la clásica marcha nupcial.

Ritos nupciales

A pesar del paso de los años, hay una serie de ritos que aún hoy son respetados a la hora de casarse en Noruega. Aunque generalmente las bodas en este país son íntimas y solamente están invitados los familiares y amigos más íntimos, se respeta la costumbre de arrojar granos de centeno y cebada a las parejas de recién casados. Cuantos más granos pueda atrapar una novia, más brillante será el futuro de la pareja.

Ya en la tranquilidad del hogar, los novios deben llevar a cabo una serie de ritos llamados a sentar las bases de un largo y feliz matrimonio. Por ejemplo, el día después de la boda tiene lugar el morgengave o «regalo de la mañana». Generalmente una joya con la que el novio agasaja a s amada

También es costumbre que las parejas recién casadas planten juntas un abeto a cada lado de la entrada de su casa. En Noruega se cree que estos árboles son el símbolo del deseo de la pareja de formar una familia.