A la hora de concretar nuestras vacaciones, casi siempre pensamos en el destino que vamos a visitar. Pero además, no se nos escapa elegir bien los hoteles así como todas las actividades que vamos a realizar. Aunque quizás lo menos común, pero siempre importante, es pensar en contratar un seguro de cancelación de viaje.
Sí, muchas personas pensamos que las vacaciones siempre tienen algo bueno y lo malo, se queda en tierra. Pero con la antelación que tendremos que hacer nuestra reserva de dicho viaje, siempre pueden pasar imprevistos. ¿Qué hacer cuando poco antes de comenzar las vacaciones, sucede algo importante que te impide salir de viaje?.
Qué es un seguro de cancelación de viaje
Como eso de pensar en las vacaciones y en la organización de un un viaje siempre saca lo mejor de nosotros, no pensamos ni reparamos en las cosas menos buenas. Pero las hay y más de lo que nos gustaría. Por eso, si solemos viajar con frecuencia y planear dichos viajes con antelación, siempre debemos de integrar el llamado seguro de cancelación de viaje. ¿Qué es?, pues se trata de una póliza que va a cubrir los gastos por la cancelación de un viaje. Eso sí, tendremos que exponer los motivos por lo que cuales no podremos realizar dicho viaje. Además, este motivo debe estar incluido en las condiciones de la póliza, para que pueda hacerse efectiva.
Pero hay que tener en cuenta una diferencia bastante grande y que en ocasiones puede jugarnos malas pasadas. Por eso, cuando acudamos a realizar la póliza, debemos preguntar bien: Por un lado tendremos el seguro de cancelación y por otro, el llamado seguro de anulación. Parece casi iguales, pero no. Ya que el primero suele estar relacionado con la cancelación por parte de la compañía con la que has contratado el vuelo, por ejemplo. Pero cuando hablamos de seguro de anulación es que la causa por la que no podremos viajar viene de nuestra parte.
Qué casos cubre el seguro de cancelación o anulación de viaje
Como bien hemos mencionado, no son iguales todos los seguros de cancelación ni de anulación. Por eso, a la hora de contratarlo, tendremos que informarnos bien de qué es lo que realmente cubren. Pero por regla general, podemos decir que suelen ser las siguientes:
- Algunos seguros de cancelación cubrirán tanto el transporte, el alojamiento, las entradas, así como las visitas guiadas que has contratado y que finalmente, no se pueden llevar a cabo.
- Mientras que la anulación del viaje cubre en primer término un fallecimiento. Siempre y cuando sea del propio asegurado o de un familiar de parentesco directo. Así como enfermedades graves o accidentes.
- El despido laboral también entrará en la póliza.
- Exámenes de oposiciones, pero para ello tienen que contar con una convocatoria posterior a haber realizado la contratación de tu seguro.
- Robo de la documentación o no tener concedido el visado.
- Intervenciones quirúrgicas de urgencia.
- Citación por trasplante.
- Embarazo de riesgo.
- Citación judicial.
- Entrega de adopción de un niño.
Cómo hacer un seguro de cancelación o anulación de viaje
Sin duda, son muchas las aseguradoras que están dispuestas a guiarte para contratar un seguro de cancelación de viaje o anulación. Por eso, siempre puedes hacer tu búsqueda vía online. Te saldrán numerosos nombres conocidos y una comparativa de las mismas. Por lo que puedes entrar en las páginas que más te convenzan y hacer el cálculo de tu seguro. Pero antes de conocer el dinero que vas a invertir, recuerda siempre leer la letra pequeña de todo aquello que cubre, por si tienes que cancelarlo. Lo cierto es que en la gran mayoría de las aseguradoras nos indican que este tipo de seguros son ‘A partir de 3 0 4 euros’.
Una vez en sus páginas, tienes que introducir una serie de datos para calcular el precio real. Entre ellos, la fecha del viaje, el destino del mismo y hasta el número de viajeros, sus edades y el precio de los vuelos o de los alojamientos. En base de una información así, suelen hacer un cálculo para un seguro estándar o premium. Si tu precio del viaje y alojamiento ronda los 1000 euros, el seguro stándar te puede salir por 25 euros y el premium por 35 euros. Son cifras orientativas, pero esto puede variar debido a diversos factores.
¿Merece la pena contratar un seguro de viaje?
Lo cierto es que, lo miremos por dónde lo miremos, la respuesta es sí. Primero porque podemos encontrar numerosos seguros donde unos son más completos que otros. Es decir, se pueden ajustar a lo que deseamos tener bien cubierto y también, a nuestro presupuesto. Por poco dinero, podremos tener una buena cobertura. Lo que hará que eso de planear las vacaciones no sea tan estresante, ya que si luego no podemos llevar a cabo nuestro viaje, no habremos perdido el dinero que hemos empleado.
Aunque es cierto que en todos y cada uno de los viajes es necesario, se aconseja más cuando dicho viaje se ha contratado con bastante antelación y debemos recorrer medio mundo. Además, si tienes una situación laboral o personal complicada, también merece la pena optar por el seguro para cubrirte bien la espalda. Tendrás una gran tranquilidad y eso, hoy en día vale mucho.