Roma, la Ciudad Eterna, es una ciudad por donde los siglos no han pasado. A pesar del paso del tiempo, hoy en día es una ciudad que no ha perdido ni un ápice de su encanto clásico.
Los viajes a Roma son muy codiciados por los aficionados al turismo cristiano. La presencia de El Vaticano, sede de la Iglesia Católica, es el foco de principal atención.
En Roma podrás visitar los monumentos más importantes como el Foro romano, el Vaticano y sus museos, el Coliseo, la Plaza y la Basílica de San Pedro entre otros.
La forma más cómoda de viajar a Roma es en avión, arribando al aeropuerto Leonardo Da Vinci, más conocido como Fiumicino, el cual se sitúa a 32 kilómetros de Roma, y está conectado con la ciudad a través de trenes que conectan el aeropuerto con la famosa Estación Terminal de Roma (Roma Termini) en tan solo 35 minutos.
Hay muchas razones para visitar Roma: su animado ambiente, su interesante conjunto museístico, su deliciosa gastronomía y sus históricos monumentos. No en vano Roma se ha convertido en la tercera ciudad europea que más viajeros recibe, sólo por detrás de Londres y París.
¿A qué esperas para visitar la capital italiana?.
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