Otro de los sitios mas conocidos de Irlanda tiene como protagonista un conjunto de ruinas que se llama La Roca de Dunamase o Dún Masc en gaélico. Son ruinas con cientos de años que se alzan a unos 150 metros de altura sobre una colina que otrora fue un sitio perfecto para la defensa sobre las montañas Slieve Bloom.
Parece que la primera fortificación data del siglo IX y que uno de los primeros ataques sufridos fue a mano de los vikingos, asiduos visitantes de las costas irlandesas, en el año 845 y provenientes de Dublin. Las ruinas actuales entonces fueron construidas posteriormente, hacia el siglo XII, y no se sabe a ciencia cierta quién ordenó su construcción, pero lo cierto es que en algún momento el castillo pasó a manos de la familia Marshal y a la muerte de la cabeza de familia quedó en poder de una mujer, Eve Marshal y después en manos de su hija y su yerno, un Mortimer.
Digamos que el castillo no tuvo muy buena suerte porque después de los Mortimer el área pasó a manos de los normandos y en las excavaciones que se realizaron allí en 1990 no se encontraron evidencias de ocupación normanda así que se supone que el castillo lleva abandonado cientos de años, desde 1350 aproximadamente. ¡Y eso es mucho tiempo! Algunos especulan con ciertos usos durante la Edad Media e incluso en el siglo XVIII, pero a ciencia cierta no puede aseverarse nada.
Hoy solo queda una parte de las murallas y de la alta torre (de 20.4 x 35.3 metros), el resto está muy dañado aunque eso no le quita belleza para los amantes de las viejas construcciones. Abre todos los días y está ubicado en el Condado de Laois a poca distancia de la ruta N80 entre los pueblos de Stradbally y Portlaoise.